domingo, 12 de agosto de 2012

"TODA LA DIÁSPORA RECORRE MI CUERPO Y COMPONE MI ACENTO" Rossih


La isla bajo el mar

25 de julio: Día Internacional de la Mujer Afrolatinoamericana y Afrocaribeña



 Este domingo, las mujeres afro levantarán su voz contra la discriminación





Información asociada
Este 25 de julio se conmemora por vigésimo primera ocasión el Día Internacional de la Mujer Afrolatinoamericana y Afrocaribeña, acto con el cual se busca desarrollar acciones específicas en atención especial a la situación de discriminación que sufren las afrodescendientes en aspectos sociales, económicos y políticos.

Este acto fue promulgado durante el primer Encuentro de Mujeres Afrolatinoamericanas y Afrocaribeñas, realizado en República Dominicana en 1992, con el propósito de hacer visibles y reconocer las luchas que contra el sexismo y el racismo han librado las mujeres negras y afrodescendientes de esta parte de nuestro continente.

Así desde esa fecha, julio es el mes aprovechado por las organizaciones de mujeres afrodescendientes para sensibilizar y difundir información acerca de las diversas formas de opresión de género y étnica que experimentan millones de mujeres en la región, logrando incidir en las causas estructurales de la desigualdad de género, identificando y contribuyendo a la disminución del impacto diferenciado del conflicto sobre las relaciones de género y apoyando las iniciativas de las mujeres por la paz.

Para la celebración del 2012, la Red de Mujeres Afrocaribeñas, Afrodescendientes y de la Diáspora, con el apoyo de la Alcaldía de Cali a través de las secretarías de Cultura y Turismo, y de Desarrollo Territorial y Bienestar Social, ha diseñado una variada programación académica y cultural para que las mujeres continúen levantando su voz contra la discriminación racial y la xenofobia.

Con énfasis especial para este año en la campaña mundial que adelanta la Confederación Sindical Internacional (CSI) ‘12 para 12’ que pretende lograr que 12 países hayan ratificado el Convenio 189 para finales de 2012, luego de la promulgación por parte de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), del Convenio 189 (C189) y la Recomendación 201 (R201) sobre las trabajadoras y trabajadores domésticos. Este convenio será ratificado una vez al menos dos países lo adopten.

El trabajo doméstico es realizado por millones de personas en el mundo, especialmente mujeres. Estos trabajos son mal pagados y su reconocimiento como trabajo es casi inexistente. En muchas partes del mundo el trabajo doméstico no es valorado frente al aporte que hacen estas personas al desarrollo de familias y niños. De esta manera, la ratificación del Convenio 189 se convierte en un elemento fundamental para el bienestar de la sociedad en general, a partir del reconocimiento de la importancia de las trabajadoras domesticas.

Este convenio que nace a partir de la reunión sostenida por el grupo de trabajadores de la Conferencia y muchos sindicatos de trabajadoras del hogar de todo el mundo, quienes se dieron a la tarea de buscar especialmente cinco propósitos:
a) Reconocimiento del trabajo doméstico como contribuyente a la economía nacional y mundial, por lo cual es un trabajo formal y quienes lo realizan tienen iguales derechos que los demás trabajadores.
b) El establecimiento de un horario de trabajo, que se respeten las horas tal como se hace frente a otros trabajadores, e incluso se cuenten sus horas de espera sin trabajo asignado como horas reales de trabajo.
c) Regulación sobre el uso de agencias temporales de empleo.
d) Un marco que permita garantizar la seguridad social, así como la salud y seguridad en el trabajo.
e) Un marco para la protección de las y los trabajadores migrantes

La importancia de este ejercicio se realizará el próximo día 29 de julio en el auditorio del Centro Cultural de Cali, donde las organizaciones de mujeres afro buscarán coadyuvar a la implementación de leyes, políticas y planes de acción nacionales para enfrentar la violencia contra las mujeres. Se pretende también que el Gobierno Nacional incorpore en sus agendas la ratificación del Convenio 189, que para las afrodescendientes es una necesidad especifica.
El encuentro recordará las palabras de Ochi Curiel: “Cuando una mujer se asume orgullosamente negra, tambalea la escala de valores negativos que sobre ella ha tenido durante años por su condición racial”. 

Reunión 21 de julio de 2012 (Documento en construcción)


Relatoría reunión 21 de julio de 2012

1.  La jornada inició con el ejercicio de taller que habíamos planeado en la reunión del 14 de julio:

Cada una de las participantes relató experiencia de vida que reflejara relaciones de género desiguales o sexistas.Preguntas a la experiencia:
  • ¿Por qué esta experiencia es sexista?
  • ¿Cómo esta experiencia especifica se relaciona con raza o relaciones raciales?
  • ¿Cómo se relaciona o se definen las categorías de género- ser mujer/hombre-otros? 
  • ¿De qué manera la experiencia es influenciada por las relaciones sociales-raciales-de género específicas que se dan en la región o el contexto geográfico? 
  • ¿Cómo se relaciona con las diferencias de clase social?
2. A reglón seguido realizamos la actividad de los conceptos de mujer, hombre y sexismo acuñados por los   diccionarios y enciclopedias.
3. Finalizamos con una actividad que nos preguntaba por el momento en que nos percatamos del hecho de ser mujeres, que dificultades nos había traído y cómo lo habíamos superdao. 

Frases par recordar o pensar
¨Curso intensivo para ser mujer¨ Qué tipo de mujer?, Para qué  tipo de sociedad?
Son los hombres negros supermachistas. Es cierto que en las comunidades negras los hombres y la sociedad en su conjunto es más machista?
Pensar es de hombres, sentir es de mujeres
A los hombres se les enseña a fraternizar, a las mujeres se les enseña a competir.


Conceptual

De acuerdo con las reflexiones realizadas por las participantes sobre sus experiencias establecimos lugares comunes de análisis de las categorias de género, raza, clase social, contexto regional y de qué forma dichas categorías interactúan de manera que diversifican las prácticas sexistas narradas en el ejercicio.  Dichas interacciones también se proyectan en la experiencia de ser mujer en una sociedad sistemáticamente sexista y racista.

Precisiones conceptuales

Qué entendemos por?

  • Sexismo
Es un sistema que genera lugares de privilegio o de beneficios sociales, económicos, culturales para los hombres. Hombre biológicamente definido como tal (aquel que posee un falo), así el ejerza una masculinidad no hegemónica o diversa.
-  Las practicas sexistas usualmente clasifican a la sociedad en dos categorias –hombre-mujer-  y  las mujeres ocupamos un lugar de inferioridad.
- En este sistema el sexismo no aplica o no funciona a la inversa- agresión a un hombre por el hecho de ser hombre no da frutos, no existe.
- La biología y las ciencias en general, entendidas como discurso social, han sido disciplinas reproductoras del sexismo. El genero y la sexualidad reducidas al hecho de tener pene o vagina son una interpretación social de la biología.

  • Género y raza
Marcas que subordinan o inferiorizan que al final constituyen ficciones para clasificar.

  • Perspectiva de género
A la pregunta: Qué significa una práctica sexista y si hay una diferencia con una relación de género?
La raza y la clase constituyen el género- no son categorías aparte.

  • Clase social
Complejizamos el concepto de clase social.  Entendemos la categoría de clase no solo desde la dimensión socio-económica sino como un agregado de capitales sociales, culturales, intelectuales y económicos que incorpora nociones de linaje y estatus.

Elementos comunes a las experiencias

1.      Clase social y raza

En el análisis sobre la relación de la categoría de clase social en las experiencias narradas coincidimos en afirmar que las diferentes clases sociales  imponen o producen también diferentes concepciones de ser una *buena mujer*, es decir, ¨una buena mujer¨ posee significados diversos dependiendo de los imaginarios de la clase social a la pertenezca, a la que aspire ella o su familia y a la de su entorno social.

En términos generales, las mujeres somos víctimas de procesos de normalización de nuestros cuerpos y conductas asociadas a patrones impuestos, ej. Cánones de belleza occidentales, manuales de feminidad (Suavidad en el comportamiento, modeluación de los tonos de voz, de las expresiones etc). Sin embargo, en la experiencia dentro de una clase social privilegiada o en contextos familiares con aspiraciones de ascenso social y económico, los patrones de normalización se agudizan y las exigencias de aconductamiento se manifiestan de una forma mas violenta hacia la diferencia, se evidencia un esfuerzo por lograr uniformidad ajustada a cánones de belleza y comportamiento europeizados o europeos, entendiendo `lo europeo` como refinamiento, blancura, delgadez, disciplinamiento del cuerpo[1]. Existen también contextos en los que se insiste en proteger una idea de raza y clase a la que no se pertenece.

En ese mismo orden de ideas, la clase social influye en la definición de patrones estéticos que definen la belleza de una mujer. Una de las de las participantes afirmaba que en las clases populares había una valoración distinta de la voluptuosidad de las mujeres o un paradigma diferente de los cuerpos femeninos y por lo tanto formas diferentes de disciplinamiento del mismo.

Los patrones de conducta y estética bajo los cuales se define una buena mujer o mujer de bien también se reflejan en un sentido distinto en las percepciones sobre las mujeres racializadas. Varias experiencias narradas[2] coincidieron en que las mujeres negras y pobres son asociadas como parte de la servidumbre o como mujeres trabajadoras sexuales, en particular, cuando estas mujeres se encuentran en lugares frecuentados por la clase privilegiada blanco-mestiza, sin embargo, el ´rótulo de empleada doméstica o trabajadora sexual está mediado también por ciertos patrones estéticos-completar-.

La asociación de las mujeres negras al rótulo de *trabajadora sexual* refleja tres percepciones comunes sobre ella, la primera es la idea de que el cuerpo de la mujer negra es un cuerpo siempre disponible, la segunda está relacionada con la idea de que las mujeres negras so-mos- hipersexuales o *buenas en la cama*, lo que en la organización social de los deseos y placeres sexuales aumenta la vulnerabilidad de las mujeres negras a la reificación sexual (sin dejar de decir que todas las mujeres somos víctimas de objetivación sexual) y tercero la asociación común de las personas negras (hombres y mujeres) con la pobreza, la marginalidad y por tanto con las labores sociales precarias.

Sobre las formas en las cuales operan los estereotipos raciales (trabajadora sexual o doméstica etc.) y las percepciones sobre las mujeres negras existen debates acerca de si la clase social puede influir en las diferenciaciones raciales, para algunas de las participantes, cuando se trata actos de discriminación racial puede presentarse un fenómeno de *desclasamiento*, es decir, que independientemente de la pertenencia de clase,  las mujeres negras experimenta-mos- discriminación  acceso a espacios sociales privilegiados, servicios y  derechos etc.

En las relaciones entre hombres y mujeres, clase y raza son elementos fundamentales para determinar la selección de la pareja estable u ocasional. Los hombres determinan cuál es la mujer que se exhibe u oculta o aquella con la que se establecen relaciones a largo plazo o aquella que ocupará el lugar de la *querida*[3] con base en la idea racista de que la blancura es igual a estatus social y privilegios. En Cartagena, las *queridas* de los hombres blanco-mestizos frecuentemente son mujeres de las clases populares, negras y de bajos niveles de escolarización; para una de las participantes, este fenómeno es la columna vertebral de los procesos de blanqueamiento en la sociedad cartagenera.

2. Contextos regionales…

Cartagena como un lugar común de los relatos…

La ciudad de Cartagena, una de las ciudades con mayor población negra en el país, con mayores índices de desigualdad socioeconómica y en la que el racismo adquiere ciertas dimensiones, se ha convertido en un escenario propicio para la comercialización del sexo y por tanto, para la oferta de mujeres a una demanda masculina principalmente conformada por hombres extranjeros.

Feminidades y masculinidades diversas en contextos regionales diversos…

En diferentes contextos regionales y de clase social las expresiones de lo ¨femenino¨ se diversifican las mujeres de la región tienen unos comportamientos diferentes de *mandonas* y trabajadoras pero sumisas frente a los hombres. También la condición de clase crea unos escenarios mas horizontales.

A diferencia de las comunidades blanco-mestizas, en las comunidades negras las mujeres asumen el rol de “proveedora” mas frecuentemente- este fenómeno deriva de las relaciones de las mujeres y hombres esclavizados en las que las mujeres asumían un rol de trabajadoras en el ámbito de lo publico de igual forma que los hombres. Este rol, ha permitido a las mujeres negras desarrollar un tipo de feminidad *masculinizada* u otro ejercicio de la feminidad que les permite relaciones mas horizontales con los hombres, ej. El contexto de Buenaventura y otras zonas rurales.

Sin embargo, una de las participantes interpelada la anterior tesis, afirmando que en el imaginario social blanco-mestizo las mujeres negras no son mujeres y por tanto estas actitudes supuestamente masculizadas no son leídas como masculinas sino como actitudes animalizadas

Bogotá, una ciudad cosmopolita y mas tolerante permite mayor movilidad y manifestación de masculinidades diversas, en ciudades como Medellín, la violencia hacia expresiones de lo masculino que no responden a lo hegemónico son altamente cuestionadas y rechazadas socialmente.

3.Mercados y cuerpos de las mujeres

En las experiencias de sexismo narradas por las participantes,  se evidencia la existencia de dos tipos de mercado, primero, el mercado matrimonial y segundo, el mercado sexual en los que el objeto de intercambio es la mujer. 

En el mercado matrimonial, los hombres asumen que una mujer soltera o con una pareja que no cuente con el nivel de aprobación suficiente, es una mujer disponible por tanto, objeto de proposiciones. En el mercado sexual, que ya hemos mencionado anteriormente existe una relación de oferta en la que los espacios y momentos de exhibición son claves en la circulación de ese objeto-mercancia en que se convierte la mujer, Ej. La forma en que las mujeres mujeres nos arreglamos para los hombres, la forma en que disponemos de nuestros cuerpos, apariencia y estética para el disfrute de los hombres.  También la oferta en el mercado matrimonial empieza desde la niñez.completar

PENDIENTE

En escenarios políticos

Practica sexista en el movimiento Afro-
En una experiencia se narró que los hombres que pretenden deslegitimar lo que una de las participantes planteaba en escenarios políticos aluden a su supuesta orientación sexual.

Sobre el Sexismo que las mujeres ejercen hacia las mujeres
Vale la pena traer a colación la frase: A los hombres se les enseña a fraternizar, a las mujeres se les enseña a competir

De auto-represión
1. Violencia de mujer negra en Cartagena restringe el comportamiento de las mujeres, las formas de vestir- determina la forma como te vistes- no tener amigos extranjeros
Internalización de estereotipos
2. De las misma forma, dichos estereotipos son internalizados tanto por aquellos que los producen como por aquellos  que son objeto-víctimas de los mismos. Fue interesante como en alguna de las reflexiones se narraba la experiencia de una mujer negra que se complacía con la idea de que se le considerara *buena en la cama*, hasta el punto de exigirse cierto nivel de desempeño sexual para complacer no solo los deseos de su pareja sino para llenar las expectativas del estereotipo.


                                                                                              


[1] Viviana
[2] Rossih, Mariluz, Alexandra
[3] Amante. 



¿Por qué existimos?
Porque no hay violencia sin respuesta