jueves, 28 de marzo de 2013

FEMINISMOS NEGROS E INTERSECCIONALIDAD.


INTERSECCIONALIDAD Y FEMINISMOS NEGROS EN MEDIO DE LA GUERRA[1]
                                                                                      Colectivo de feminismo afrodiaspórico


“Nos tocó salir sin ropa y sin nada, me dio pena cuando llegué a Guapi. No ve, que venía sin peinar, toda sucia, sin comer; toda la mañana metida debajo de la cama y sudando petróleo” [2]

Estas palabras, expresadas por una mujer afrocolombiana originaria del corregimiento de Limones, hacen parte del comunicado que el 12 de Marzo de 2013, puso en circulación  la regional del Consejo Comunitario Mayor de Comunidades Negras del Cauca (COCOCAUCA). Como bien lo expresa su título, hubo un “DESPLAZAMIENTO EN EL CONSEJO COMUNITARIO DE GUAJÍ – GUAPI (COSTA PACÍFICA DE CAUCA) POR COMBATES ENTRE EJÉRCITO Y FARC”. 360 familias salieron del corregimiento, presas del pánico y la incertidumbre. Se amenazó a la población civil con la posible detonación de un artefacto explosivo. Las personas insistieron en quedarse en su territorio en un acto de resistencia, pues aducían que dejarse desplazar los pondría en una posición de mendicidad en otro lugar. Pero la falta de garantías del Estado frente a la situación que enfrentaba la población de Limones, las llevó a pedir refugio en corregimientos cercanos como Joanico, Quiroga, Esteros y el casco urbano de Guapi. Aquel territorio por el que estaban dispuestas (os) a resistir, se convierte en un campo de batalla y resistencia.

Lo acontecido el 12 de marzo es una clara violación de Derechos Humanos y se prescribe como una situación de crisis humanitaria. Sin embargo, los medios de comunicación oficiales no han informado sobre lo ocurrido, ni las voces de los defensores de derechos humanos han visibilizado su indignación; NINGUNA expresión organizativa de mujeres feministas se ha solidarizado con nuestras comunidades y nuestras mujeres negras, NINGÚN(A) congresista ha dicho nada. Puesto que se trata de comunidades racializadas, no tienen el derecho a llamarse víctimas.
¿Cómo analizar  las dinámicas de opresión que entran en juego en los hechos que generaron esta denuncia? ¿Quiénes son los dominadores y cuáles son sus intereses? ¿Cómo estos hechos afectan a hombres y a mujeres en relación al espíritu colectivo de las comunidades? ¿Es posible reparar los efectos de los hechos denunciados en la vida, saberes y prácticas de las comunidades?

Bases ideológicas e intersección de los sistemas de opresión

Para abordar estas preguntas, recordemos que la dominación moderna europea puso en marcha dos dispositivos: primero, el colonialismo como forma de sometimiento material, cultural y político que se propuso la expropiación de territorios y recursos, y para ello puso en marcha la violencia, el exterminio y la esclavización. En segundo lugar se instauró la colonialidad que, a través de la violencia epistémica, que consistía en deslegitimar los saberes y prácticas no eurocéntricas y que para ello instaló el ideal de blanqueamiento.
Ahora bien, las situaciones vigentes de exterminio en los territorios y de desplazamiento forzado, como lo constata el reciente caso del río Guajuí, revelan procesos de neo-colonialismo, con los que se persigue la apropiación de territorios ancestrales y de recursos minero-energéticos para el desarrollo de megaproyectos,  y de neo-colonialidad y violencia epistémica al someter a las comunidades al desplazamiento forzado y con ello poner en riesgo los  significados y prácticas de vida colectiva.  
Es en medio de estas dinámicas que encontramos especificidades en las violencias dirigidas hacia las mujeres negras afrocolombianas que  pasan de ser ejercidas por agentes externos a las comunidades para instalaste en las dinámicas y relaciones propias de la comunidad. De este modo, la violencia física se incorpora como violencia simbólica en el cotidiano, con chistes y, expresiones tales como: “por eso luego aparecen descuartizadas”. Esto da cuenta de que el sistema moderno-colonial de género es cada vez más violento, vigente y funcional a los procesos de genocidio de las comunidades, al hacer parte de la transformación social profunda de las estructuras que han hecho posible la resistencia de nuestros pueblos.

De la Territorialidad y la Des-territorialidad
Los territorios colectivos ancestrales del pueblo Afrocolombiano se encuentran sobre la franja de los litorales del Pacífico y el Caribe colombiano. Esta ubicación sitúa a las comunidades en el punto de intersección generado por varias vías de dominación: la primera, producida por el Racismo Estructural que nos condenó a vivir en geografías destinadas al sistemático abandono estatal que, con descaro, ahora intenta convencernos de que nuestros territorios son una fabulosa oportunidad para sacar a Colombia del subdesarrollo; la segunda vía es generada por el sistema capitalista y neoliberal que ha destinado la inversión macroeconómica a invadir los territorios colectivos, despojándonos de la oportunidad de continuar con nuestras prácticas tradicionales de producción –en su mayoría basadas en mecanismos de aprovechamiento de los recursos naturales sin ir en detrimento de la sostenibilidad de los ecosistemas, y en abierta contraposición a las lógicas de la extracción a gran escala y a los megaproyectos de infraestructura industrial–. La tercera vía ya instalada posibilitó los efectos del neoliberalismo, siendo la transportadora de la colonialidad que soporta el sometimiento estructural de orden racial-sexista y neocolonial que sostuvo la construcción de la nación moderna eurocéntrica. Con la colonialidad se impuso el mandato de la exclusión, la marginación y la violencia sobre los pueblos otrora esclavizados, como elementos centrales en la consolidación de los estados modernos latinoamericanos.

La Territorialidad condensa lo mucho que esas subjetividades, esclavizadas en el plano físico pero aferradas a la libertad, construyeron para las generaciones siguientes. No podríamos dejar de anotar que nuestros territorios no estuvieron exentos de las políticas de dominación colonial que impusieron dinámicas de desigualdad y violencia ejercidas por los hombres hacia las mujeres, o de aquellas que generaron la subvaloración de nuestras estéticas y espiritualidades satanizadas aún por las doctrinas judeo-cristianas; esto complejiza el proceso de emancipación necesario para depurar totalmente las carimbas mentales que generó la colonialidad del poder y del saber. Pero a su vez, la Territorialidad permitió conservar cuerpos de conocimiento alternativos para la satisfacción de las necesidades básicas que nos fueron negadas por los proyectos independentistas y republicanos de aquellos hombres-blancos-criollos que fundaron la nación racista, sexista, capitalista, colonialista, heterosexista y neoliberal que aún hoy nos oprime.

Es por ello que el fenómeno del desplazamiento forzado no solo vulnera a la diáspora africana colombiana, sino que transgrede el sentido de la territorialidad y, con ello, amenaza la supervivencia de nuestros pueblos.


Es imprescindible contextualizar el concepto de Territorialidad para exponer la situación de las mujeres negras-afrocolombianas en este país, pues la interseccionalidad de las opresiones sexista, racista, capitalista, heteronormativa y colonialista se materializa en las múltiples formas de violencia que sufrimos a través de las políticas de inversión desarrollista que afectan los territorios ancestrales de las comunidades negras, y que producen la des-territorialidad de los pueblos por segunda vez  –teniendo en cuenta que la primera fue la sufrida por nuestras ancestras/os africanas/os producto de la trata trasatlántica de la esclavización–.  

Las mujeres negras afrocolombianas han ejercido un papel fundamental en los procesos de resistencia históricos y contemporáneos. Estas mujeres han sido las guardianas de la herencia africana en nuestros territorios y a su vez, se han encargado de sustituir al Estado al ejercer el compromiso de dar salud, educación, bienestar, vida y seguridad a las comunidades a través de sus conocimientos en partería, medicina tradicional, etnoeducación, espiritualidad, redes de solidaridad, etnobotánica, el respeto por las dinámicas del ecosistema y por el agua de los ríos y mares que navegan a diario (de los que también alimentan a la población). Estos, junto con otra cantidad de factores, han permitido la supervivencia en y de los territorios con mayores niveles de biodiversidad y riqueza cultural del país y del mundo.

No es un secreto para nadie que las fuerzas vigilantes de los sistemas de opresión han implementado estrategias de violencia terrorista sobre las mujeres de este país; ejercen violencia sexual, mutilaciones, embarazos forzados, confinamiento y violencia psicológica y física. Pero queremos recalcar que las pérdidas de las mujeres negras-afrocolombianas parteras, sabedoras, cantaoras, lideresas de nuestras comunidades, así como la expropiación de sus territorios, genera una pérdida irrecuperable para los pueblos afrocolombianos. No podemos dejar de denunciar y alertar sobre la situación que padecen las mujeres negras del Pacífico colombiano, en especial aquellas que residen en Buenaventura, quienes hoy son víctimas de la más aterradora y cruel incursión de la violencia generada por el neoliberalismo que, con la firma de tratados internacionales como el TLC con Estados  Unidos, llevaron a las fuerzas del paramilitarismo a masacrar hombres y mujeres negras para que dejemos nuestros territorios a merced de los proyectos de expansión.

Para hacer más comprensible y cercana la crisis humanitaria que padecen nuestras mujeres negras afrocolombianas, nos permitimos citar un fragmento de un comunicado del 17 de Noviembre de 2012, hecho por mujeres de Buenaventura organizadas en el Proceso de Comunidades Negras (PCN) que titula: “La mala aventura de las mujeres de Buenaventura”. Dice lo siguiente: “El patrón para asesinar a las mujeres en los últimos tres años en Buenaventura consiste en la perpetuación de prácticas de tortura y sevicia; descuartizar vivas a las mujeres, arrancar una a una las extremidades de su cuerpo, degollarlas, arrancar sus senos y glúteos y luego exhibirlas o dejarlas en una bolsa para basura, violarlas y dejarles en las vaginas pedazos de palos”.

Nuevas Territorialidades
Como producto del desplazamiento forzado, en los últimos 40 años las geografías de los cascos urbanos y/o capitales de departamento han venido transformándose. Hoy por hoy resulta cada vez menos posible homogenizar los rasgos fenotípicos de los habitantes de estas zonas del país, lo que ha dado lugar a la constitución de nuevas identidades y territorialidades.  

Es particular el papel de las mujeres en los procesos de reformulación de las resistencias en estos nuevos territorios, pues también comprende su protagonismo en las remembranzas de las historias que cuentan las abuelas del Pacífico. Como lo narra Ányela, una de nuestras compañeras aquí presentes: “mientras me sentaba en el piso para trenzar mi cabeza y embadurnarla de aceite de almendras o coco, me recordaba lo linda que soy, que soy única, descendiente de mujeres fuertes, luchadoras y con una gran capacidad de transformación. Con ellas, así como con nuestras ancestras, establecí el compromiso de seguir adelante, de luchar y vencer, de jamás sentirme menospreciada por otros u otras, sino todo lo contrario, vivir siempre con la frente en alto. Los momentos que conservo vivos en la memoria me obligan a  peinar diariamente la existencia con el misticismo único de mi abuela, el mismo que ayuda en gran medida a que mis hermanas de la diáspora se liberen, desahoguen y fortalezcan sus vidas, arraigando en la urbe esa solidaridad cada vez más ausente”. Estos lazos son construidos en espacios únicos de comunicación, solidaridad y sororidad. Tal es el  caso de las mujeres negras afrodescendientes de Usme (en Bogotá), quienes han forjado en años recientes procesos organizativos propios para resistir a las diferentes violencias a las que cotidianamente están expuestas.

Nuestro colectivo
En este contexto hasta aquí expuesto, un grupo de mujeres que, en su mayoría comparte una historia de desarraigo producto de la violencia sistemática del Estado que continúa arrebatando día a día la posibilidad certera y vital de permanecer en nuestros territorios,  hemos convenido en la construcción de un espacio de conspiración y resistencia. Y nos identificamos como una de las expresiones del feminismo negro de la diáspora africana. 

Nuestro discurso está cruzado tanto por los planteamientos de la lucha antirracista del movimiento afrocolombiano, como por los abanderados por las mujeres negras a través de la lucha afrofeminista, anticolonial, anticapitalista, antisexista y anti-imperialista. No obstante, defendemos el hecho de que nuestras luchas y reivindicaciones son diferenciadas, puesto que nuestras experiencias y el lugar en que nos sitúa el régimen político-económico también lo son.

Nuestra apuesta es por la re-significación de lo que nos ha sido hurtado, de nuestros epistemes, de la importancia ontológica del ser mujeres, inescindible del sujeto colectivo que nos define, así como de nuestras formas propias de resistencia; y es a partir de aquí que nos posicionamos para la construcción de una propuesta política.

El Colectivo de Feminismo Afrodiaspórico lo integramos mujeres negras y blanco-mestizas del Pacifico, del Caribe, de los Andes y del Oriente del país. Aunamos esfuerzos para la consolidación de un proyecto político, desde las perspectivas de quienes hemos sido deslegitimadas por sociedades construidas con el propósito de sostener los diferentes sistemas de dominación.



[1] Escrito elaborado a varias manos por las integrantes del colectivo y leído a varias voces el 22 de marzo de 2013 en el conversatorio con Kimberlé Crenshaw sobre feminismos negros e interseccionalidad.
[2] Testimonio de una de las señoras desplazadas a causa de los enfrentamientos en el corregimiento de Limones.  





domingo, 17 de marzo de 2013

Igualdad Racial en las Américas y Feminismos Negros e Interseccionalidad

Esta es una semana interesante. El 21 y 22 de marzo a las 9:00 a.m. se realizará en la uniminuto el Panel Internacional de Políticas de Igualdad Racial en las Américas Colombia, Brasil y EE.UU. en perspectiva comparada y luego a las 2:00 p.m. en el Claustro San Agustín cra 8 No 7-21 se llevará a cabo el conversatorio sobre Feminismos Negros e Interseccionalidad con la profesora Kimberlé Crenshaw. Nos vemos allá!


lunes, 11 de marzo de 2013

Exploración de la producción académica de Kimberlé Crenshaw Expo 3

 2 de marzo de 2013

 Viviana (Vivi)

Ponente: Diana Lorena

Texto: Tres tipos de encuentros inesperados: reflexiones sobre la teoria de la dominación y la interseccionalidad.

Lo hace con base al simposio Caterine Mack….. que critica como el feminismo blanco aborda el feminismo negro lo ve como contestatario a sus planteamientos y que lo limitan a que solo da soluciones para mujeres negras.

Kimberlé rescata que en esa ponencia la señora Caterine (feminista blanca) plantea cuestiones de interseccionalidad.

El feminismo siempres ha sido criticado por esencialista y universalista y  el racismo por ser construído por el pensamiento del hombre negro.

Resalta que Caterine planteó:

1.      Paradoja semejanza diferencia en las políticas de antidiscriminación lo que hace es perpetuar las opresiones
2.      Problemática de la doble militancia en la lucha reivindicatoria de las mujeres negra desde lo construido por el racismo-hombres negros y feminismo – mujer blanca.

Primer encuentro entre Caterine y Kimberlé: Subrepresentación de los grupos vulnerables en la producción de las leyes mantienen el status quo.

Derry Bell (hombre negro), amplia el concepto de raza en términos legales para hablar sobre la construcción racial del poder. 

TAREA: Explorar el término de discriminación compuesta, CIDH.


TERMINADA LA REUNIÓN

Rossih: Manda el texto de Betty Ruth
Vannesa: La vida de Kimberlé Crenshaw
Ana Margarita: Sentencias de racismo
Yaya: Ley antidiscriminación 

Lugar CNOA
Hora de inicio: 2:40pm
Asistentes:

Diana Lorena Montaño
Dayana Blanco
Viviana Gamboa
Eliza Muñoz
Rossih Martinez
Maryluz Barragan
Ana Margarita González
Vanessa Cortés

Exploración de la producción académica de Kimberlé Crenshaw Expo 2

 2 de marzo de 2013

 Viviana (Vivi)

Ponente: Ana Margarita

Texto: La interseccionalidad de la discriminación por género y raza. (Contexto de sistema de DDHH)

Analiza el vacio que hay en el sistema de los derechos humanos con relación a esta intersección y los efectos en los mecanismos de reparación, por lo cual propone un protocolo de cómo deberian funcionar.

1.      Para hacer los reportes, se debe hacer análisis de abajo hacia arriba.
2.      Preguntar por otras cosas, por lo no evidente.

Desafios:
1.      Discriminación basada en identidades de grupo.
2.      Hiperdesarrollo de los estandares de género y un subdesarrollo de los de raza.


Advirtió que los reportes de DDHH habian invisibilizado las violaciones que devienen de la identidad de género.  Sin embargo, hoy se reconoce la violación como un crimen de lesa humanidad (esta tipo de delito tiene un tratamiento diferente con penas mucho mas severas y puede ser perseguido independiente del tiempo en que fue cometido).

La interseccionalidad propone que la condición de ser mujer y racial encuentra una mayor vulnerabilidad cuando se cruza con otra otro opresión.

Advierte que existe una invisibilidad estructural que se manifiesta en dos fenómenos: la sobre-inclusión la categoria de género es demasiado amplio y no tiene en cuenta particularidades; sub-inclusión: cuando el enfoque se da exclusivamente a la problemática de un grupo de mujeres, las privilegiadas; mano invisibilisble, se refiere a las factores estructurales.

Tipos de discriminación interseccional:
1.      Focalizada: Violencia etnica y racial contra mujeres es el mas común. Da como ejemplo el caso de Ruanda. Plantea que existe un vacio con relación al tratamiento de de la violación a las mujeres negras en cuanto se supone que estan mucho mas dadas a consentir en las relaciones sexuales, esto está marcado basicamente por los estereotipos de hipersexualización
2.      Compuesta: Para explicarlo plantea el ejemplo cuando las mujeres de color no son contratadas ni siquiera en cargos que ejercen mayoritariamente mujeres.
3.      Estructural Dinámica: Políticas pública o acto individual que imponen una carga mayor a mujeres racializadas por prejuicio racial.
4.      Subordinación  estructural: Políticas públicas que afectan desproporcionadamente aun cuando no son intencionales. (Ej: Distribución inequitativa de los recursos en planteles educativos)
5.      Interseccionalidad política: Las mujeres no pueden demandar la discriminación de género dentro de su comunidad con el pretexto de las prácticas culturales.

Para explicar el punto 3 y 4  Rossih pone ejemplo del acceso a la salud. Cáncer en una comunidad negra porque no existe el hospital y cuando llega a la ciudad es discriminada o no atienden las caracteristicas de la enfermedad que padece.

Exploración de la producción académica de Kimberlé Crenshaw Expo 1

2 de marzo de 2013

 Viviana (Vivi)

Tema: Exploración de la producción académica de  Kimberlé Crenshaw

Texto 1: Desmarginalizando la intersección entre raza y género. Una crítica del feminismo negro a la doctrina antidiscriminación, a la teoria feminista y a la política antiracista.

Ponentes: Viviana y Rossih

El texto empieza relatando tres casos de demandas de mujeres afroamericanas contra distintas empresas. Visibiliza lo problemático de la definición de la mujer negra, puesto que al demandar por discriminación por este concepto los discursos judiciales escinden las dos categorias género-raza, así las cosas, si se analiza una posible discrimanación la conclusión sería que no en tanto las empresas tendrian mujeres (aunque blancas) trabajando y hombres negros trabajando.

Posteriormente, la autora propone ejemplos prácticos para entender como opera la discriminación para lo cual dibuja una colisión de varios carros de diferentes direcciones que atropellan a una persona, para explicar que resulta problemático establecer quien produjo el golpe fatal.

Advierte que el discurso de la discrimación se queda corto, puesto que al hablar de discrimación por género sólo queda protegidas las mujeres blancas y al hablar por raza sólo los hombres, quedando anulada la categoria mujeres negras.

Critica la política antirracista al ilustrar las opresiones como un edificio con muchos pisos plantenado que al interior existen diferentes niveles de opresión, en ese sentido las reivindicación de los derechos sólo tienen en cuenta a los menos oprimidos o “quienes se ubican en nivel superior del piso y que su cabeza topa con el techo”

Plantea que la violación no sólo es una expresión de la dominación del hombre sobre la mujer sino que, es un instrumento para causar terror en las comunidades racializadas, es asi que, este fenómeno tiene un efecto mas agresivo en las comunidades negras. Esta circunstancia es tan compleja, que una mantiene una tensión en las agendas antiviolación y antiracistas, en tanto existe el imaginario de que es el hombre negro es el violador.

Sostiene que existe una barrera mucho mas fuerte para las mujeres negras para agenciar dinámicas de políticas antipatriarcales, puesto que, es necesario realizar alianzas con los hombres negros para la lucha contra el racismo.


La noción de discrimación se contruye a partir de los grupos privilegiados, es decir, las mujeres blancas son las que la construyen la de género y la racial, a partir de la concepción de los hombres negros. En ese orden, la teoria jurídica  analiza la discrimación a partir de estas dos de manera individual, por lo que la autora propone el concepto de intersección al momento de hablar de mujeres negras en tanto es inescindible las dos categorias.

Adicionalmente, manifiesta que las mujeres negras estaban “sub-representadas” en tanto se necesita un mínimo de legitimidad en los grupo subordinado para ejercer acciones legales, asi las cosas, la Corte de USA rechazaban las demandas porque no representaban legítimamente el sentimiento generalizado de las mujeres ni de las comunidades negras.



domingo, 3 de marzo de 2013

RESUMEN DOBLE DISCURSO DE LOS GRUPOS DOMINADOS



 Dayana (Yaya)
DOBLE DISCURSO DE LOS GRUPOS DOMINADOS
Patricia Hill Collins
Los primeros textos de teoría feminista negra salieron a la luz en la segunda década de los 80´s en la llamada Segunda Ola del feminismo.
En la segunda década del siglo XX el movimiento feminista se formó desde los distintos enfoques conocidos como feminismo liberal, feminismo radical y feminismo socialista, presentes aun en el discurso de feminismo hegemónico.
Feminismo(s) en castellano (Sanchez): Se articulan en 2 temas:
1.    Lo personal es político: Conflictos de las mujeres en lo privado.
2.    Tesis de las causas de la opresión: Para lo cual se utiliza el concepto del patriarcado reformulado en términos de sexo-género. Una de las premisas centrales de este sistema, tal y como lo formuló Rubin en un artículo seminal en 1975, explica la complementariedad de los sexos y la opresión de las mujeres por los hombres a través del intercambio de las mujeres dentro de los sistemas de parentesco (…)¿Qué ocurre ―se preguntaron― cuando las mu- jeres no se encuentran en las mismas posiciones respecto a la institución del parentesco? ¿Qué ocurre con la idea de género si grupos enteros de hombres y mujeres están situados juntos, fuera de la institución del parentesco, pero relacionados con la institución del parentesco de un grupo dominante?[1]
Carby, Hurtado y Spiller a fin de tratar el tema se devuelven a la esclavitud para descubrir que la constitución en la sociedad americana de blancas y negras no fue la misma. Lo que denunciaban era el propio concepto de género, en la medida en que formaba parte del sistema de relaciones jerárquicas de «raza».[YB1] 
La tercera vía, propuesta de Patricia Hill Collins conexión entre conocimiento, conciencia y políticas de empoderamiento:
1.     En la medida en que se construye desde la experiencia vivida y no bajo una posición teóricamente «objetiva», el conocimiento se crea dialógicamente.
3.     En el feminismo negro el investigador y la investigadora no están separados, distanciados de la verdad, es una rendición de cuentas personal.
Aporte de Patricia Hill Collins al feminismo negro
a.    Redefine el concepto de opresión en términos de interseccionalidad incorporando lo que denomina «matriz de dominación», y adopta la «teoría del punto de vista» para caracterizar las bases del pensamiento feminista negro, enfatizando la perspectiva de las mujeres negras sobre su propia opresión.
b.    Muestra la articulación entre conocimiento y empoderamiento.[YB3]  a) el de las relaciones de las mujeres negras entre sí; b) la tradición de las cantantes de blues; y c) las teóricas afroamericanas. Mientras el primero está anclado en el día a día de las mujeres negras, los dos últimos son los que han dado voz históricamente a las mujeres que no tenían voz[2].
c.    Sitúa la lucha por la auto-identificación de las mujeres negras, en tanto colectivo de lucha, en un diálogo entre acción y pensamiento. «Cambios en el pensamiento ―afirma― pueden alterar conductas y las conductas alteradas pueden producir cambios en el pensamiento».


[1] Copiado textual.
[2] Copiado textaulmente.

 [YB1]Si los  opresores cuentan la historia de los oprimidos, es imposible que por lo menos estos últimos encuentren en aquella la verdad sobre su experiencia, este es otro ejemplo de dominación. Así pasó, probablemente con el feminismo, la mujer negra tuvo que construirlo por ella misma.

 [YB2]Todo conocimiento está cargado de valor.
 [YB3]Como se explicó